Estamos en un País cada vez mas contaminado por la política de un Presidente de Gobierno que no sabe otra cosa que mirarse al ombligo y hacer cualquier cosa con tal de mantenerse en el poder. La pena es, que esta persona está sujetada por los poderes que controlan los medios de comunicación y difícilmente nos podremos escapar de su influencia.
La mayoría de los españoles habíamos “pasado de hoja” a la época del Franquismo, que no quiere decir “olvidado”, ya que es parte de nuestra historia y para muchos de nuestra vida consciente (los que tenemos mas de 50). No obstante el Sr. Zapatero se ha empeñado en traer de nuevo la división de los españoles en izquierdas y derechas, con el fin de asegurarse el voto de los que “románticamente” aún creen en una izquierda que ya no existe, el voto de aquellos que no creyendo en la derecha y menos después de destaparse los casos de corrupción como el Gurtel.
El Sr. Zapatero, que para mi, es un inútil como gestor político, está consiguiendo lo que ningún español con sentido común nos podíamos creer, está creando un enconamiento y enfrentamiento entre diferentes capas sociales españolas lo cual resulta inaudito. Pero además esta llevando el enfrentamiento a las autonomías, lo cual me parece igual de grave.
Pero más grave me parece que en esta aventura le apoyen muchos medios de comunicación, que le ayudan en su adoctrinamiento a una parte de la población.
También me parece muy grave que la derecha esté prácticamente fuera de combate, motivado por la falta de autoridad de un Líder que no ha sabido coger al “toro por los cuernos” en los casos de corrupción, contentándose en decir “y tú más”.
Casi a diario vemos las mismas noticias en distintos medios, pero con distinta carga ideológica. Pasa lo mismo con los “tertulianos”, que al final se ha convertido en una profesión ya que casi siempre están los mismos en la radio o TV, da lo mismo la emisora o cadena que elijas. Dependiendo del medio, nos dirán lo que creen que sus seguidores quieren oír.
Diariamente tenemos que luchar contra este “adoctrinamiento” y ser capaces de poder analizar lo leemos, oímos o vemos, conformando con ello un pensamiento libre de la influencia de los medios de comunicación.
Desde aquí hago un llamamiento al “sentido común”, a la reflexión y a profundizar en las ideas y oportunidades que nos ofrece un nuevo partido político como UPyD, oportunidad de renovar a la clase política, en busca de una mejor calidad de vida y convivencia para los españoles.
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